«Tomás Gascón, el artesano»

Tomás Gascón

Analizar la controvertida personalidad de Tomás Gascón es un asunto que no requiere ninguna simplificación. El artesano del tambor heredó de su padre, Juan José Gascón, toda la maestría en la fabricación de los instrumentos de percusión. El Padre Mindán, en su memorable trabajo para el libro El sueño de los tambores (2005), describe al padre de Tomás, Juan José Gascón Trallero, junto a Pascual Labarías Lahoz, el Juanete y Antonico Herrero, el confitero, como los mejores percusionistas en la primera mitad del siglo XX.

Tomás Gascón fabricó miles de tambores y bombos, que los fue vendiendo a medida que los iba construyendo. Empezó a trabajar desde muy niño en la pequeña casa de la calle Santa Águeda, y cuando la vivienda y el corral que tenía enfrente quedaron desbordados por la cantidad de material almacenado, se trasladaron a vivir a la calle San Miguel, en la confluencia con la plaza de España. Allí en la planta baja regentó un bar, con su mujer Josefina, al que le pusieron el nombre de Bar Olimpia.

Tomás Gascón concurso tambores Híjar (Foto del C.E. del Bajo Martín)
Tomás Gascón concurso tambores Híjar (Foto del C.E. del Bajo Martín)

Tambores y bombos de Calanda despiden a Carlos Saura

Carlos Saura rompe la hora en Calanda - Semana Santa 2008

Hoy a medio día la Academia de Cine de Madrid ha abierto la capilla ardiente de Carlos Saura con el sonido de los Tambores y Bombos de Calanda. Por petición expresa de su familia, una representación de los tambores y bombos de Calanda se han desplazado a Madrid para despedir y homenajear a este gran cineasta aragonés. 

Carlos Saura visitó Calanda en 1966 y posteriormente volvió para grabar algunas escenas de su película «Peppermint Frappé». Durante su vida repetiría su visita a Calanda en varias ocasiones, una de ellas muy especial, en 2008 cuando fue invitado de honor para ROMPER LA HORA.

La familia de Saura preside el último adiós a Carlos Saura con los tambores de Calanda (Europa Press)

«Esa obsesión por los tambores…» por Pedro Rújula (Prólogo del libro «Cofradía Jesús Nazareno, 50 años de historia»)

Semana Santa Calanda 2018 - Rompida de la Hora - Foto de José Quintana Merino

No hay otro lugar como Calanda que combine de manera tan perfecta la multitud y el individuo, el sonido envolvente y la percusión íntima, la voluntad de ser parte de un todo colectivo y la excitante afirmación de la autonomía personal. Aquí, en el corazón del Bajo Aragón, tiene lugar un rito que se repite cada año. Como si de renovar un pacto secular se tratara, centenares de vecinos se reúnen para anudar multitud de sentimientos en una sola ceremonia. Y todo gira en torno a un instrumento de apariencia humilde como el tambor que, sin embargo, es capaz de trascender los límites de lo evidente. Decía Salvador Dalí que Buñuel estaba obsesionado por los tambores. “Cuando estábamos en Los Ángeles —decía—, cenamos una vez y no hablaba más que del día que podría volver a Calanda. Esa obsesión por los tambores…”.

La presencia de Luis Buñuel en el universo de los tambores de Calanda ofrece un buen punto de apoyo para comprender lo que tiene lugar durante las veintiséis horas que siguen al mediodía de Viernes Santo. En ese tiempo se dan cita sin solución de continuidad la herencia religiosa, que en el imaginario local representa la figura de mosén Vicente Allanegui, y la dimensión secular encarnada por el cineasta calandino. El interés de Buñuel por los tambores, documentado ampliamente en las conversaciones mantenidas por el escritor Max Aub,1 hizo de estos un icono de la cultura universal. El sonido ronco, los toques conservados en la memoria, el regreso periódico a su pueblo natal para tocar el tambor y sentirse entre los suyos fueron la otra cara de aquellos tambores que acompañaron por el mundo a películas inmortales como La Edad de Oro, Nazarín o Simón del desierto.

No hay otro lugar como Calanda que combine de manera tan perfecta la multitud y el individuo, el sonido envolvente y la percusión íntima, la voluntad de ser parte de un todo colectivo y la excitante afirmación de la autonomía personal. Aquí, en el corazón del Bajo Aragón, tiene lugar un rito que se repite cada año. Como si de renovar un pacto secular se tratara, centenares de vecinos se reúnen para anudar multitud de sentimientos en una sola ceremonia. Y todo gira en torno a un instrumento de apariencia humilde como el tambor que, sin embargo, es capaz de trascender los límites de lo evidente. Decía Salvador Dalí que Buñuel estaba obsesionado por los tambores. “Cuando estábamos en Los Ángeles —decía—, cenamos una vez y no hablaba más que del día que podría volver a Calanda. Esa obsesión por los tambores…”.

La presencia de Luis Buñuel en el universo de los tambores de Calanda ofrece un buen punto de apoyo para comprender lo que tiene lugar durante las veintiséis horas que siguen al mediodía de Viernes Santo. En ese tiempo se dan cita sin solución de continuidad la herencia religiosa, que en el imaginario local representa la figura de mosén Vicente Allanegui, y la dimensión secular encarnada por el cineasta calandino. El interés de Buñuel por los tambores, documentado ampliamente en las conversaciones mantenidas por el escritor Max Aub,1 hizo de estos un icono de la cultura universal. El sonido ronco, los toques conservados en la memoria, el regreso periódico a su pueblo natal para tocar el tambor y sentirse entre los suyos fueron la otra cara de aquellos tambores que acompañaron por el mundo a películas inmortales como La Edad de Oro, Nazarín o Simón del desierto.

Salvador Simó – director de «Buñuel en el laberinto de las tortugas»

calandanazareno - Buñuel en el laberinto de las tortugas

Antes de nada tengo que agradeceros profundamente vuestra presencia en el Festival de Málaga, lo convertisteis en algo mágico, pusisteis nuestras emociones a flor de piel y nos acercasteis a vuestra tierra y al personaje de Luís de una forma que nadie habría podido igualar.

La historia de Luis empieza en Calanda, su infancia y sus paisajes que siempre llevó dentro, pero esa secuencia en la que se abre camino a través de los tambores no deja de ser también una metáfora de su camino a lo largo de su vida.

Los tambores y bombos de Calanda en el Festival de cine de Málaga 2019

calandanazareno - festival cine Malaga 2019 2

Al igual que ocurrió hace 10 años, una representación de los tambores y bombos de Calanda se han desplazado a Málaga para participar en su prestigioso Festival de Cine. El motivo ha sido la presentación de la película «Buñuel en el laberinto de las tortugas«. La adaptación de la novela gráfica de Fermín Solís (Cáceres, 1972) que ha dirigido Salvador Simó es uno de los títulos más esperados del año ya que, antes de estrenarse, ha cosechado varios premios internacionales, entre ellos el de Mejor Director en el reciente Cartoon Movie.

Los tambores y bombos de Calanda en el homenaje a Luis Eduardo Aute en Barcelona (02/02/2019)

Calandanazareno - Tambores de Calanda - Animo Animal - Barcelona 02-02-2019

El Sábado 2 de febrero de 2019 una representación de los tambores y bombos de Calanda se ha desplazado a Barcelona para participar en el homenaje que la ciudad condal ha realizado a Luis Eduardo Aute. Por segunda vez en poco tiempo (el día 10/12/2018 se celebró otro homenaje en Madrid) el mundo de la música y de la cultura en general se ha volcado para dar ánimos a Luis Eduardo.

Tambores de Calanda - Animo Animal - Barcelona 02-02-2019 (foto de Juan Miguel Morales)
Tambores de Calanda – Animo Animal – Barcelona 02-02-2019 (foto de Juan Miguel Morales)

 

Tambores de Calanda - Animo Animal - Barcelona 02-02-2019 (foto de Juan Miguel Morales)
Tambores de Calanda – Animo Animal – Barcelona 02-02-2019 (foto de Juan Miguel Morales)

Los tambores y bombos de Calanda en el homenaje a Luis Eduardo Aute (Madrid 10/12/2018)

calandanazareno - Animo Animal Aute

Una representación de los tambores y bombos de Calanda han participado en el homenaje que más de veinte amigos y admiradores de Luis Eduardo Aute le han ofrecido en Madrid el la tarde/noche del lunes 10 de diciembre de 2018. Este concierto/homenaje, denominado «Ánimo animal» en referencia a una de sus más famosas canciones, ha contado con la presencia de nombres tan reconocidos como Silvio Rodríguez, Joaquín Sabina, Joan Manuel Serrat, Ana Belén, Massiel, Víctor Manuel, Dani Martín, Pedro Guerra, José Mercé, Rozalén, Vicente Feliú, Rosa León, Andrés Suárez, Ismael Serrano, Luis Pastor, Miguel Poveda, Marwan, Jorge Drexler, Cristina Narea y Suburbano (que tantas noches de arte compartieron con Aute).

Luis Eduardo Aute y Calanda

calandanazareno - Luis Eduardo Aute

Luis Eduardo Aute en la inauguración de las Jornadas Nacionales de Exaltación del tambor, Calanda 2014
Luis Eduardo Aute en la inauguración de las Jornadas Nacionales de Exaltación del tambor, Calanda 2014

«Calanda es muy peculiar. Ahí, el fantasma de Buñuel está en todas partes. Para mí es el cineasta más grande de la historia del cine. Él y Hitchcock, pero él primero, según mis identificaciones con su cine. Estar en el pueblo donde nació Buñuel y además con ese delirio de los tambores, que se cuenta a cualquiera y no lo entiende… Hay que estar allí para ver cómo es esa catarsis colectiva. Siempre que puedo vuelvo a Calanda.»

Luis Eduardo Aute