Es imposible reflejarlo con palabras. Ser Nazareno es latido vivo de corazón Jueves Santo en el Viacrucis. Abrazos de reencuentro cuando rompemos las doce. Fervor, familia y amigos con cada paso del pregón. Rezo, silencio, fuego sobre el costalero en la Soledad.
Creer que la madrugada puede ser eterna! pero no… con los primeros rayos de sol el Entierro, nos apaga la llama. -Llegan las dos y nuestros bombos rasgan la palillera!
Somos tambores que no quieren callar!
Silencio con lágrimas amargas de despedida nos marcan el final.
Qué significa ser Nazareno? Comprobarlo vosotros mismos…
Pedro Lacueva Moya
